Este miércoles 10 de febrero en Chile un grupo de 138 migrantes irregulares de nacionalidades colombiana y venezolana que estaban a la interperie en la frontera norte con Bolivia, fueron expulsados de manera definitiva.
Los migrantes se encontraban desde hace días en una región fronteriza donde una fuerte ola migratoria ha llevado al límite a pequeñas localidades.
«Estamos en presencia del primer vuelo que sale desde el norte y da cuenta de un proceso de expulsión, en su mayoría personas que ingresaron de forma clandestina hace menos de tres meses», así lo expuso el ministro del Interior Rodrigo Delgado desde la pequeña localidad de Colchane, próxima a la frontera con Bolivia.
Más de un millar de extranjeros entró al país suramericano, en menos de siete días lo que generó la semana pasada una tensión sin precedentes en ese municipio, que cuenta con solo 1.700 habitantes, que se encuentra cerca de la localidad de Pisiga una población boliviana a 3.600 mtros de altura sobre el nivel del mar.
Con información de EFE