Un grupo de pescadores fueron detenidos cuando realizaban su faena en playas de Villar Marina, el pasado viernes en horas de la noche, por lo que efectivos militares los trasladaron hasta la Estación de Guardacostas 904 de Amuay, alegando que estaban violando las restricciones de horario por cuarentena.
En primer momento, detuvieron a nueve pescadores, de los cuales liberaron a cinco y dejaron detenidos a los otros jóvenes, a quienes presentaron ante el Juzgado Segundo de Control.
Marlenis Giraldo madre de uno de los imputados, junto a otras representantes, acudió a la sede tribunalicia para alzar su voz en contra de lo que define como una injusticia y un acto de venganza personal en contra de uno de los pescadores.
Relató que uno de los militares le gritó a uno de los detenidos que «ahora le iba a pagar» el problema que tuvieron en 2013.
«No es posible que le hayan colocado una escopeta para hacer ver que presuntamente portaban armas en la lancha, además les están imputando los delitos de porte ilícito de armas, drogas y asociación para delinquir. Además están recibiendo un trato inhumano».
Reclaman la investigación exhaustiva de las autoridades y aseguró que irán hasta las últimas instancias para que se aclare el caso de privación ilegítima de libertad de los cinco pescadores de Villa Marina.
Blanca Sánchez