La comunidad de la urbanización Monseñor Iturriza en Coro fue escenario de un cruel acto de maltrato animal los días lunes 07 y martes 08 de abril, cuando dos perros comunitarios fueron envenenados, perdiendo la vida de manera inmediata. Uno de ellos era una hembra que había dado a luz hace apenas tres semanas a ocho cachorros, dejándolos en total desamparo.
Vecinos alertaron sobre la presencia de una bolsa con queso envenenado, cuyo olor era tan fuerte que afectaba a cualquiera que se acercara. Testigos reportaron que uno de los perros fue visto consumiendo el contenido de la bolsa antes de su trágico deceso, lo que evidencia un acto premeditado.
Gracias a la rápida movilización de la comunidad, se logró la intervención del Comisionado Jefe del DIEP, Edgard Sojo, el módulo policial de la calle 6 del urbanismo y la organización Guardianes de Patitas Falcón, quienes colaboran en las investigaciones para dar con el responsable.
Este acto no solo representa una grave crueldad hacia los animales, sino también un peligro para los residentes, especialmente niños, quienes podrían haber entrado en contacto con el veneno. La situación pone en evidencia la necesidad de tomar medidas urgentes para evitar tragedias mayores.
La comunidad exige justicia y condena enérgicamente estos hechos. Se hace un llamado a la conciencia ciudadana y a las autoridades para que se aplique la ley con todo su rigor. «No podemos permitir que la violencia contra seres indefensos quede impune. Hoy fueron estos peluditos, mañana podría ser un ser humano», expresaron.
Las investigaciones continúan y se espera que pronto se haga justicia por estos inocentes.
FI