Uno pegado al otro, viajan los usuarios que van de pie en busetas y autobuses, porque como un cuento, pareciera que tomaron el tema del distanciamiento social los conductores de las unidades de transporte público que cubren las diferentes rutas del municipio Carirubana.
El riesgo a contagiarse de coronavirus dentro de una buseta o autobús a la hora de hacer uso del servicio de transporte urbano es inevitable, y las autoridades no hacen nada al respecto. Es de mencionar, que los usuarios manifiestan que se ven obligados a trasladarse de esa manera ante la escasez de unidades colectivas que persiste en la península de Paraguaná, mientras que los conductores alegan que ellos no obligan a nadie a viajar así.
Sin embargo, al momento en que una unidad de transporte público se detiene a subir pasajeros, la frase más repetitiva de los colectores es: “Vamos a pegarnos un poco más que ahora es que cabe gente”.
El llamado de los usuarios es a que se puedan agregar unidades a la flota del transporte urbano, pues argumentan que aunque existe una empresa de transporte público del Estado, sus autobuses no logran abastecer la demanda de pasajeros.
Emerson Martínez