Los maestros del Comité Directivo de la Federación Venezolana de Maestros se muestran altamente preocupados por como se ha dado el proceso educativo venezolano durante la pandemia. Ante esto, como organización sindical y gremial dieron a conocer su posición.
Los docentes calificaron de excluyente el sistema de clases a distancia, esto por una sola razón la cual ellos consideran fundamental: El Internet. El servicio de Internet de Venezuela a su juicio es «…el peor de América Latina». Aunado a esto, los educadores agregan que ni los estudiantes ni los profesores, tienen las herramientas necesarias para que el programa educativo realizado en medio del COVID-19 sea eficaz.
«la gran mayoría de docentes y estudiantes no cuentan con recursos tecnológicos, como laptop, computadoras, teléfonos inteligentes para el desarrollo y evaluación de los contenidos programáticos”.
Con respecto al programa «Cada familia una escuela», el cual se transmitió en el canal Venezolana de Televisión, lo calificaron de improvisado. Consideran que los docentes que impartían las clases no estaban preparados ni poseían el dominio de los contenidos. Otro de los aspectos que más preocupa al comité es el aspecto salarial, aseveraron que el docente venezolano posee un sueldo de menos de Bs. 1.500.000 el cual no es suficiente para mejorar la calidad de vida.
“Los docentes, en esas condiciones no están dispuestos a incorporarse a un nuevo año escolar. El salario del docentes no le permite acceder a la canasta Básica Alimentaria y mucho menos a la Básica Familiar, razón por la cual se encuentra desmotivado para incorporarse en el mes de septiembre al llamado a clases, ni por vía presencial, ni por vía distancia online”